The Connection Between Skipping Breakfast And Acne

La conexión entre saltarse el desayuno y el acné

Una cosa que les recalco a mis clientes que tienen problemas con el acné (especialmente aquellos con acné hormonal) es la importancia de mantener regulados los niveles de azúcar en sangre.

1. Aumento de los niveles de insulina

Saltarse el desayuno o comer de forma irregular puede provocar fluctuaciones en los niveles de azúcar en sangre. Cuando los niveles de azúcar en sangre bajan, el cuerpo responde liberando insulina para ayudar a regularlos. Los niveles elevados de insulina pueden estimular la producción de andrógenos (hormonas masculinas) en el cuerpo. Los andrógenos, en particular la testosterona, pueden aumentar la producción de grasa en las glándulas sebáceas de la piel, lo que provoca la obstrucción de los poros y la aparición de acné.

2. Deterioro de la función de barrera cutánea

Una nutrición inadecuada, causada por saltarse comidas, especialmente el desayuno, puede comprometer la función de la barrera cutánea. Una barrera cutánea debilitada es menos eficaz para retener la humedad y proteger contra irritantes y patógenos externos. Esto puede hacer que la piel sea más susceptible a la inflamación, las infecciones y los brotes de acné.

3. Aumento de la producción de sebo

Los niveles inestables de azúcar en sangre pueden alterar el equilibrio hormonal, lo que provoca una sobreproducción de sebo (grasa cutánea). Esta producción excesiva puede contribuir al desarrollo del acné, obstruyendo los poros y proporcionando un caldo de cultivo para las bacterias que lo causan. Además, la combinación de exceso de grasa y células cutáneas muertas puede provocar la formación de comedones (puntos negros y blancos) y lesiones inflamatorias del acné.

4. Desequilibrio hormonal

Saltarse el desayuno y los patrones de alimentación irregulares pueden alterar el equilibrio hormonal, en particular los niveles de insulina y cortisol. El cortisol, conocido como la hormona del estrés, puede aumentar como respuesta a saltarse comidas o a fluctuaciones en los niveles de azúcar en sangre. Los niveles elevados de cortisol pueden contribuir al desarrollo del acné al estimular la producción de sebo y promover la inflamación de la piel.

5. Inflamación

Las fluctuaciones en los niveles de azúcar en sangre pueden desencadenar respuestas inflamatorias en el organismo. Cuando los niveles de azúcar en sangre se disparan, se puede producir una reacción inflamatoria, como citocinas y especies reactivas de oxígeno. La inflamación crónica está estrechamente relacionada con el desarrollo del acné, ya que puede exacerbar las lesiones existentes y contribuir a la formación de nuevas.

En resumen

Saltarse el desayuno y no mantener un nivel constante de azúcar en sangre puede contribuir al acné al aumentar los niveles de insulina, promover la inflamación, estimular la producción de sebo, deteriorar la función de barrera cutánea y alterar el equilibrio hormonal. Para ayudar a prevenir los brotes, es importante mantener niveles estables de azúcar en sangre mediante comidas regulares y equilibradas, y priorizar una dieta nutritiva rica en frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras.

¡Gracias por leer!

Este artículo de Skinsider Scoop fue escrito gentilmente por la esteticista holística y especialista en acné, Taylor Gasbarro . Editado por el equipo de Clean Skin Club. Si te interesa saber más de Taylor, escríbenos y síguela en Instagram: @skinbytaylor_