6 razones por las que necesitas una funda de almohada antibacteriana

Te lavas la cara a diario y nunca olvidas el protector solar, pero ¿sabías que la funda de tu almohada es esencial para una rutina de cuidado de la piel saludable? Hablemos de todas las razones por las que la higiene no se limita al cuidado de la piel.

1. ÁCAROS DEL POLVO : Los ácaros del polvo son parientes de las arañas que viven en nuestros hogares. Su principal fuente de alimento son las células cutáneas muertas. Si bien son una parte importante del ecosistema, lamentablemente también dejan sus... ejem... desechos. Según la Fundación Americana del Asma y las Alergias

   Que la materia fecal es un alérgeno común para más de 20 millones de estadounidenses.

2. CÉLULAS MUERTAS DE LA PIEL: Los humanos perdemos alrededor de 200 millones de células cutáneas cada hora, y dormir de 7 a 8 horas por noche genera una gran cantidad de células cutáneas en la almohada. Esta descamación es una fuente ideal de ácaros del polvo, bacterias y otros microorganismos, que se instalan y se quedan más tiempo del debido.

3. SEBO: El aceite natural de nuestra piel, conocido como sebo , puede ser absorbido por la funda de la almohada. Esto puede ser especialmente problemático para quienes sufren de acné o incluso de exceso de grasa en el cabello y el cuero cabelludo.

4. CASPA DE MASCOTAS: Amamos a nuestras mascotas, pero lamentablemente, incluso si no se les permite dormir con usted, su caspa se acumulará en su almohada. Esta caspa ayuda a alimentar a los microorganismos. Además, se han reportado casos poco frecuentes de transmisión de infecciones bacterianas de mascota a dueño debido al contacto con la funda de la almohada.

5. BACTERIAS: Nos importa mucho mantener nuestra piel limpia y sana, lo que incluye eliminar las bacterias innecesarias de la superficie cutánea. Nuestras fundas de almohada pueden albergar la acumulación de diversas bacterias que pueden afectar la salud general de la piel.

6. HONGOS - Se han identificado más de diez mil especies de hongos en las fundas de almohadas y un estudio realizado por la Universidad de Manchester descubrió que el hongo más común encontrado en las fundas de almohadas se llama Aspergillus fumigatus , que puede exacerbar el asma y puede representar un riesgo para la salud de aquellos que tienen el sistema inmunitario comprometido.

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